Empiezo dibujando sus ojos color café
Trazos que no se ven a simple vista
Más allá de su mirada, me quita el sueño
Ese algo que se esconde en su sonrisa
Aquellas risas en el portal marcan el papel
Viajan por mi mente sin que se resista
Recuerdos que dejan el corazón extraño
Entre latidos que mi corazón improvisa
El carboncillo se desliza por la línea de su cuello
Marcando con destreza sus clavículas
Mis manos, con alma y sin dueño
Se recrean por su piel hasta que se eriza
Mella, hacen mella por donde pisan
Mis dedos desacostumbrados a tanta belleza
Siguen el camino que marca mi respiración
Esbozando su cintura con delicadeza
Insisten, no es suficiente
No les basta con dibujar cada línea de su cuerpo
Porque llegó libre como el viento de levante
Dejándolo todo al descubierto
Continúan dibujando para saber qué se siente
Cuando el corazón casi queda abierto
Dibujan incansables, siguiendo la corriente
Haciendo y deshaciendo, pero muy lento
Empecé dibujando más allá de sus ojos color café
Ahora me pierdo en su aroma que se lleva la brisa
Intentando dibujar algo que no sé qué es
Ese algo que solo puede regalarme ella
“Me tranquilizas”